domingo, 22 de enero de 2012

Reset.


Bailes de tijeras en mi cabeza, liberando peso, pies descalzos encima de la mesa.
Las tripas que ríen y cantan al compás de la batuta de mis labios.
Más ganas de vivir que de escribir. Indulgencia.
Otro concepto de comerme el mundo en cada atardecer. 

viernes, 6 de enero de 2012

Cogí la escoba para barrer yo misma las hojas de otoño, buscaba un invierno anticipado. Pero no fue mejor. Quise apresurarme, como siempre, buscar otro callejón que no albergara mucha nieve. Topé con mi propio génesis que hablaba de kilómetros a la espalda, de caos, de aquel destino que no me alcanzaría y que acabó arroyándome.  Las llaves que no encuentro, las ilusiones mareadas vomitando en cada curva, quién hizo el asfalto y para quién, los libros condenados a sentencia de muerte tras un punto y final, ¿quién quiere desempolvar un libro sin metáfora? “Una mente cerrada actúa desde lo conocido. No inaugura. No descubre situaciones sorprendentes”.