Volveré a mentir, a caer en la
trampa que minutos antes yo misma coloqué,
volveré a pintarme los labios rojos,
a tantear precipicios de madrugada,
elevarme del suelo a destiempo, descompasada,
perder la noción, mi risa, tu boca.
De la nada sacaré el remedio para vendar
cicatrices,
para adulterar primeras apariencias y
vomitar encima de ellas.
Un ictus cerebral como morada,
encasillada,
atada a la fatalidad.
Vaciar armarios volviendo a dejar una vida.
El café que se enfría mientras me dices que
las
sábanas son el espejo del alma.
Desconecto el teléfono,
hago la cama.
'Volveré a pintarme los labios rojos, a tantear precipicios de madrugada'.
ResponderEliminarGuau, te leo desde http://drogasyamoor.blogspot.com.es/
Besitos.